LA LECTURA COMPRENSIVA

La lectura comprensiva es clave para el éxito académico y personal; es fundamental en cualquier contexto de aprendizaje.

La lectura comprensiva es clave para el éxito académico y personal

La lectura comprensiva es clave para el éxito académico y personal; es fundamental en cualquier contexto de aprendizaje.

Esta actividad no se limita solo a la decodificación de información, sino implica integrar conocimientos previos, interpretar y construir significados. En la actualidad, existe una saturación de información, especialmente en las redes sociales, por esta razón, un buen lector debe ser capaz de comprender, analizar, evaluar y utilizar de manera efectiva dicha información, tanto en el ámbito personal como profesional

Sin embargo, si no se desarrolla el hábito de lectura comprensiva se tienen consecuencias negativas en contextos académicos y profesionales. Por ejemplo, en el ámbito escolar, la falta de habilidades de lectura afecta el desempeño en exámenes, tareas y proyectos. Los estudiantes pueden encontrar complicado seguir instrucciones detalladas, interpretar preguntas complejas y analizar textos críticos, lo que se traduce en calificaciones más bajas y un menor rendimiento general. Todas estas dificultades fomentan un desinterés por la lectura.

Para prevenir estos problemas y cultivar un interés duradero por la lectura, lo ideal es desarrollar el hábito lector desde la infancia, en los primeros años de vida; incluso desde el vientre materno. Esta práctica no solo estimula el desarrollo cognitivo y emocional de los infantes, sino que también fortalece el vínculo entre padres e hijos. Por ejemplo, la lectura en voz alta, los cambios de voz, los gestos permiten conectar al niño con su entorno, facilitando el desarrollo del vocabulario, el lenguaje y la imaginación.

Establecer rutinas de lectura, crear momentos específicos para contar historias, elegir libros cortos con imágenes son algunas acciones para fomentar en las primeras etapas de vida el gusto por la lectura. Pero especialmente, el modelaje. Ver a sus padres leer con la entonación, el ritmo, y los cambios de voz promoverán en los más pequeños el desarrollo de sus habilidades lingüísticas.

En la edad adulta, también se puede fortalecer este hábito. Primero, ser conscientes de las limitaciones que se tienen y trabajar en ellas. Ya que, ser un lector activo es fundamental, e implica involucrarse con el texto y para ello es importante reconocer tres momentos de este proceso:

1. Antes de la lectura: establecer un objetivo previo según el título o el tema, reconocer el tipo de texto, preguntarse; qué sé del tema y establecer predicciones que permitan mantener la atención durante el proceso lector.

2. Durante la lectura identificar ideas principales, reconocer el significado de términos a través del contexto y comprobar si las inferencias previas son ciertas o no. Hacerse preguntas según lo leído o conectar ideas con otros temas.

3. Después de la lectura: resumir o sintetizar a través del parafraseo de forma oral o escrita. Realizar esquemas o conectar con otros textos para profundizar en la temática leída. Compartir ideas con otros.

Es momento de darse la oportunidad de desarrollar este hábito y aplicar las estrategias adecuadas a través de diferentes lecturas. Por ejemplo, seleccionar artículos relacionados con el campo de trabajo o de interés personal, temas deportivos, políticos, religiosos o de superación y por qué no literarios. En este sentido, el Internet se convierte en una herramienta invaluable que permite tener acceso a obras literarias o textos, a través de blogs, documentos académicos o bibliotecas virtuales.

En consecuencia, como ocurre con cualquier hábito, solo la práctica constante y la consistencia permitirá fortalecer y mejorar la competencia de lectura comprensiva. Al establecer metas claras, seleccionar textos relevantes, emplear técnicas de lectura activa, se podrá mejorar significativamente la capacidad de comprender y analizar textos. De esta manera, la lectura comprensiva se convertirá en una herramienta poderosa que enriquecerá tanto la vida profesional como personal.

Referencias:
Achaerandio, L. (2009). Reflexiones acerca de la lectura comprensiva.

Por: Lcda. Evelyn Ibarra